Tips para conocer y cuidar mejor tu vehículo

Tips para conocer y cuidar mejor tu vehículo

¿Estás cuidando tu vehículo? Debes saber qué combustible usar o qué revisiones y el mantenimiento que necesita, entre otras cosas, para que funcione correctamente por mucho tiempo.

¿Quieres a tu vehículo? Aprende a cuidarlo bien

Cuidar tu vehículo es fundamental; es un activo para el que seguramente trabajaste mucho, así que lo más sensato sería preservarlo en las mejores condiciones. Para hacerlo con criterio, debes conocer información clave como cuál es la calidad de combustible recomendada para tu vehículo, cuáles son las principales revisiones que debes realizar (aceite, frenos, filtros, batería, llantas, etc.), cómo identificar ruidos, cuán importante es la alineación y el balanceo, cómo lavar adecuadamente el exterior y el interior del vehículo y cuáles son las mejores prácticas de manejo por la ciudad y en carretera, entre otras cosas.

 

Tiempo de lectura: 17 minutos

Cuida tu vehículo

Para cuidar tu vehículo es esencial que le des el mejor uso posible y que sigas las recomendaciones del fabricante para darle un adecuado cuidado y así evitar gastos adicionales por falta de mantenimiento. Por ello, la clave para que seas un buen propietario de tu vehículo está en el mantenimiento regular, pues previene los daños ocasionados por el desgaste normal que se produce por su uso y evitar fallas mecánicas que pueden generar accidentes viales.

 

Para ser un propietario de vehículo responsable es fundamental saber cuáles son esas tareas que se deben realizar de forma frecuente y tener en cuenta algunos consejos que permitan alargar la vida del vehículo. En esta guía ofrecemos la información que necesitas para cuidar de forma adecuada tu vehículo y así garantizar su funcionamiento y buen estado general.

 

Contenido:

1. Tipos de gasolina: ¿cuál es su diferencia?
2. ¿Qué aspectos debo evaluar en mi vehículo?
3. ¿Cómo identificar ruidos en mi vehículo?
4. ¿Por qué es importante la alineación y el balanceo del vehículo?
5. ¿Por qué debería llevar mi vehículo a un taller de la red de concesionarios autorizados?
6. ¿Cómo puedo ubicar un taller autorizado para mi vehículo?
7. ¿Cuándo debo planificar las visitas al taller de servicio autorizado?
8. ¿Cuál es la mejor forma de lavar el exterior de mi vehículo?
9. ¿Cómo conservar mejor los elementos exteriores de mi vehículo?
10. ¿Cómo puedo limpiar el interior de mi vehículo?
11. ¿Cuáles son los mejores consejos para cuidar los espacios interiores de mi vehículo?
12. ¿Cuáles son los errores comunes al conducir que afectan los sistemas del vehículo?
13. ¿Cómo debo preparar un viaje por carretera?
14. ¿Cómo conducir de forma segura en la ciudad?

 

 

Gasolina corriente o extra: ¿cuál es su diferencia?

En Colombia existen dos tipos de gasolina: la corriente y la extra (premium). Lo que las diferencia es su octanaje: mientras que la primera es de 87 octanos, la segunda es de 92. El octanaje es una escala que mide la capacidad antidetonante del combustible y determina la forma en la que la gasolina hace combustión (se quema) en el cilindro del motor. La gasolina de mayor octanaje como la extra tiene una combustión más controlada y uniforme, mientras que la corriente, al ser de menor octanaje, enciende más rápido y tiene menor control antidetonante.

 

Es preferible que la gasolina haga combustión de una forma controlada para mejorar el rendimiento del motor del vehículo. Sin embargo, cada vehículo tiene sus particularidades debido las características de su motor. Por ello, lo más aconsejable es usar la gasolina con el octanaje recomendado por el fabricante.

 


Diésel corriente o extra: ¿cuál es su diferencia?

En cuanto al aceite combustible para motores (ACPM), mejor conocido como diésel, también encontrarás dos tipos: el extra o de bajo azufre, que por lo general tiene un cetano de 47; y el corriente, que tiene un cetano de 45. En el motor de diésel el número de cetano indica con qué facilidad se inicia la ignición. Según el modelo de tu vehículo, necesitarás un mayor o menor número de este compuesto1 para que el motor funcione correctamente. Y esto es algo que debes verificar en las recomendaciones del fabricante.

 

Utilizar un diésel con un mayor número de cetano del recomendado para tu vehículo no mejora de forma significativa su eficiencia y operación. Pero utilizar un número de cetano menor sí puede afectar el funcionamiento del vehículo, porque el proceso de encendido será más tardío. Las consecuencias pueden ser menor potencia, mayor ruido y consumo de combustible.

Cuidado de mi vehículo - aspectos a valuar

¿Qué aspectos debo evaluar en mi vehículo?

Aceite Motor

 

El aceite es un lubricante clave para el funcionamiento óptimo del motor de tu vehículo. Debes revisar su nivel con frecuencia y siempre debes revisar antes de un viaje largo. Debes prestar también atención al cuadro de instrumentos, ya que existe un indicador que da información al conductor sobre el correcto funcionamiento del sistema de lubricación del motor, sobre todo si este nivel es mínimo. Sin embargo, no se recomienda esperar a esta alerta, sino más bien revisar el nivel periódicamente en función de tus desplazamientos.

Para realizar esta revisión necesitas la varilla de medición y que el motor esté frío. Esta tiene dos indicadores; uno que indica el mínimo y otro el máximo. Si el nivel está por debajo del mínimo o por encima del máximo debes llevar tu vehículo al taller de nuestra red de concesionarios. Lo ideal es que el nivel esté entre las dos referencias de la varilla cuando el motor esté frío. Además de revisar el nivel, debes tener en cuenta que con el tiempo el aceite se ensucia y pierde propiedades. Lo más recomendable es cambiarlo cada 10.000 kilómetros2 o cuando tu vehículo cumpla el año (1) de comprado, en caso de que aún no haya llegado al kilometraje antes mencionado.

Líquido Refrigerante del motor

 

La función del líquido refrigerante es absorber parte del calor que se genera con la combustión del motor, proteger de la corrosión el circuito de refrigeración del motor y así evitar un sobrecalentamiento y daños del motor. El refrigerante, al igual que el aceite, pierde propiedades con el tiempo, por lo que debes revisarlo con frecuencia y siempre debes revisar antes de un viaje largo.

 

Para realizar esta revisión necesitas que el motor esté frío y observar el depósito el cual tiene dos indicadores; uno que indica el mínimo y otro el máximo, Si el nivel está por debajo del mínimo o por encima del máximo debes llevar tu vehículo al taller de nuestra red de concesionarios. Si es necesario añadir líquido, utiliza exclusivamente los productos homologados que podrás encontrar en nuestra red de concesionarios.

 

Si al revisarlo notas que el refrigerante ha perdido su color original o está sucio, es necesario cambiarlo. Y si el líquido está en las condiciones óptimas, lo recomendable es esperar y sustituirlo cada 80.000 km3 o cada 4 años, lo que ocurra primero. Para el cambio de este líquido debes llevar tu vehículo a un taller de nuestra red de concesionarios.

 

Líquido de frenos

 

Este líquido es fundamental para el correcto funcionamiento del sistema de frenos. Dada su importancia para la seguridad, es importante revisarlo con frecuencia o cuando se detecta una diferencia en la eficiencia al frenar. Su nivel óptimo está entre los indicadores de mínimo y máximo, el nivel baja normalmente conforme se van desgastando las pastillas de freno, pero no debe hacerlo nunca por debajo del nivel mínimo, no intentes llenar el recipiente: esto lo debe realizar un especialista de nuestra red de concesionarios.


Batería

 

La vida útil de la batería depende del uso que le des al vehículo o del estado del sistema eléctrico, del uso en pequeños recorridos o tras la utilización prolongada de elementos consumidores (radio, luces internas, luces exteriores) con el motor parado. Es conveniente revisar la batería durante cada mantenimiento periódico es decir cada 10 mil Kms o cada año. Aunque hay casos en los que debe hacerse antes si el sistema eléctrico tiene alguna falla o si la batería estuvo inactiva durante mucho tiempo o si se hace un uso excesivo del arranque.

Cuida tu vehículo - Presión de llantas

Presión de inflado de las Llantas

 

Debes revisar la presión de aire de las llantas al menos una vez al mes4 y respetar la presión que propone el fabricante del vehículo que se encuentra generalmente en un adhesivo ubicado en la puerta del conductor. También debes revisar los bordes para asegurarte de que no tengan deformaciones o cortes que pudieran causar que se revienten. Otro aspecto que debes evaluar es la profundidad de la banda de rodamiento, pues de ella depende el agarre de las llantas.

 

Es importante que te familiarices con el manual del propietario de tu vehículo para que atiendas sus recomendaciones en cuanto al mantenimiento, el combustible y los líquidos recomendados. Además, debes estar atento a las alertas que el propio vehículo dé, como los testigos en el cuadro de instrumentos, así como hacer una revisión exterior para verificar que no haya fugas de líquidos y que las llantas estén en buen estado, por ejemplo.

¿Cómo identificar ruidos en mi vehículo?


Si tu vehículo hace un “ruidito” extraño debes prestarle mucha atención, porque indica que algo no está funcionando bien. Así que, si tu vehículo presenta cualquier ruido, lo mejor que puedes hacer es tratar de identificar qué tipo de ruido es, de qué parte del vehículo proviene (de abajo, de la parte delantera o trasera, etc.), y en qué momento se produce. Con esta información clara debes ir a un taller autorizado de la marca para que un experto haga la revisión.

 

¿Por qué es importante la alineación y el balanceo del vehículo?

 

Estos son dos servicios de mantenimiento que permiten extender la vida útil de las llantas y afecta el comportamiento de tu vehículo. La alineación es un proceso por el cual se ajustan los ángulos de la dirección y suspensión del vehículo para que miren siempre al frente. Es decir, para que estén perpendiculares al camino y paralelos entre sí. El balanceo, por su parte, es un proceso que se realiza para distribuir el peso entre las llantas y los rines de manera uniforme. De esta forma la rueda es capaz de girar sin producir vibraciones o ruidos anormales a determinadas velocidades.

 

Cuando notas que tu vehículo tiende a irse hacia un lado cuando sueltas el volante, o si después de girarlo no regresa a su posición, debes verificar la alineación. Si llegaras a sentir vibraciones en el volante deberás revisar si se debe a un abultamiento o a un desbalance de las llantas.
Lo más recomendable es alinear y balancear las llantas cada 10.000 kilómetros5 o cada año según el uso del vehículo; esta es una operación complementaria y se debe realizar bajo autorización del usuario.

 

Las ventajas de un vehículo correctamente alineado y balanceado son:

 

  • Menor gasto de combustible, porque se produce una menor fricción de la llanta en el suelo.
  • Aumento de la vida útil de las llantas, porque se evita su desgaste irregular.
  • Conducción más fácil y mejora de la seguridad, porque evita que el vehículo derrape.
  • Mayor confort en la conducción.

Cuida tu vehículo - red de concesionarios

¿Por qué debería llevar mi vehículo a un taller de la red de concesionarios autorizados?

La red de concesionarios autorizados cuentan con talleres y con profesionales certificados que conocen a la perfección tu vehículo. Al ser expertos en la marca están mejor capacitados para realizar cualquier trabajo en tu vehículo, ya sea una reparación grande o menor, o incluso un mantenimiento preventivo o correctivo.

 

Además de contar con mano de obra calificada, los talleres autorizados ofrecen las siguientes ventajas:

 

● Cuentan con lo necesario para realizar el trabajo correctamente: disponen de todos los manuales, herramientas, equipos de diagnóstico, etc., para realizar las reparaciones.
● Ofrecen garantías: si tu vehículo está en garantía, un taller autorizado puede realizar reparaciones sin que esta se pierda, siempre y cuando se utilicen accesorios y recambios originales y de calidad.
● Disponen de piezas de recambio originales: un taller autorizado cuenta con las piezas necesarias para que tu vehículo quede como nuevo.

¿Cómo puedo ubicar un taller autorizado para mi vehículo?


Ubicar un taller autorizado para tu vehículo es muy sencillo. Los fabricantes incluyen en su web un apartado con su red de talleres autorizados. Al colocar tu ciudad se te mostrará una amplia lista de opciones con su ubicación y número de teléfono.

 

Otra opción, es realizar la búsqueda directamente en un motor de búsqueda como Google. Si indicas el modelo y la marca de tu vehículo y tu ubicación podrás encontrar opciones y visitar la página web de los talleres autorizados, si la tienen.

¿Cuándo debo planificar las visitas al taller de servicio autorizado?

 

Para asegurar el correcto funcionamiento de tu vehículo debemos revisarlo de forma periódica en un taller de servicio autorizado. El momento para cada revisión lo establece Renault cada 10.000 kilómetros6 (8.000 kilómetros en el caso de Renault Sport) o al año de uso, lo que se cumpla primero. Sin embargo, este periodo puede ser de cada 5.000 kilómetros o cada 6 meses dependiendo del uso del vehículo en condiciones severas como por ejemplo (el 50% del uso del vehículo se realiza a bajas revoluciones a una velocidad inferior a 30 km/h, al menos 30% de los kilómetros recorridos con arrastrando un remolque, caravana con un peso superior a 500 kg o utilización en un entorno polvoriento).

 

En cada revisión se controlan 40 puntos entre los cuales están los controles de; el campo de visión del conductor (cristales y funcionamiento de limpiaparabrisas), los sistemas de iluminación interior y exterior, el motor y sus fluidos, los elementos de seguridad (sistema de frenos, sistema de dirección, sistema eléctrico), los elementos de control del medio ambiente (sistema de aire acondicionado, estado de la carrocería).

Cuida tu vehículo - Lavado exterior

¿Cuál es la mejor forma de lavar el exterior de mi vehículo?


Es importante lavar el vehículo con frecuencia para evitar que se acumule la suciedad. Tener el vehículo sucio también puede afectar el rendimiento de las luces, de los sensores o de las cámaras, en caso de que disponga estos elementos. Existen dos opciones para lavar tu vehículo: llevarlo a un lavadero para que lo haga un tercero o hacerlo tú mismo en casa.


La opción más cómoda y segura es llevarlo a un lavadero. Según el tipo de lavadero, se puede realizar la limpieza con rodillos (en el caso de los túneles de lavado) o de manera tradicional (con un sistema de agua a presión). En los lavaderos la limpieza del exterior se hace de manera profesional y con productos adecuados, asegúrate que utilizan productos profesionales. Además, el secado se realiza con aire a alta velocidad para que no queden manchas.

 

En casa el lavado puede ser más complejo. Necesitarás un espacio amplio y un sistema a presión para que el lavado sea óptimo. Además, debes saber bien cómo usar ese sistema, porque si lo haces de forma incorrecta podrías dañar la carrocería. El secado también es más complicado: debes utilizar paños de microfibra y emplear otro paño diferente para encerar. Adicionalmente, el gasto de agua es mayor.

Cuida tu vehículo - elementos exteriores

¿Cómo conservar mejor los elementos exteriores de mi vehículo?

Pintura


● Lava el vehículo regularmente para que la suciedad acumulada no lo deteriore.
● No dejes el vehículo mucho tiempo parqueado bajo el sol.
● Evita estacionar debajo de los árboles. Además de la suciedad general que puede caerle, el excremento de pájaro es altamente corrosivo para la pintura de tu vehículo.
● No uses paños secos para limpiarlo, porque podrías producir rayones en la pintura.
● Si lavas el vehículo en casa, utiliza productos especiales para vehículos.
Llantas y rines
● Comienza la limpieza cuando las llantas estén completamente frías, para que el calor no evapore el agua, el jabón y los demás productos de limpieza.
● Usa un cepillo y un balde de agua distintos para los rines y para las llantas.
● Cepilla a profundidad para eliminar toda la suciedad acumulada.
● Si puedes y tienes tiempo, desmonta cada cierto tiempo las llantas para limpiarlas mejor.
● Utiliza productos de limpieza específicos para darle brillo a las llantas. También puedes usar mezclas caseras a base de vinagre o glicerina.

Luces

● Lávalas con abundante agua y con una esponja suave.
● Sécalas suavemente con una toalla de microfibra limpia.
● No uses productos químicos abrasivos, porque aceleran la descomposición de su película protectora.
● Inspecciónalas cada seis meses o al menos una vez al año para verificar que estén en buenas condiciones.

 


Parabrisas y demás cristales


● Utiliza productos específicos para vidrios de vehículos, pues los domésticos, por ejemplo, tienen amoníaco, que pueden dejar rayas en el parabrisas.
● Usa un paño de microfibra para vehículos, que es suave y no raya.
● Reemplaza los limpiaparabrisas (plumillas) cuando notes que pierden su eficacia.
 

Cuida tu vehículo - Lavado interior

¿Cómo puedo limpiar el interior de mi vehículo?

● Presta atención a los materiales de los distintos elementos: el plástico, la tela y el cuero son algunos de los materiales más usados en el interior del vehículo. Debes identificar cuál ha sido usado en cada elemento y elegir los productos de limpieza aptos para cada uno.
● Aspira el interior: utiliza un aspirador pequeño y potente y pásalo por todas las superficies, tanto en el tablero como en los asientos. Retira las alfombrillas para limpiar el suelo.
● Utiliza un limpiador adecuado: prepara una solución con agua y jabón o utiliza un líquido limpiador para interiores. Frota los diferentes elementos del interior con ayuda de un cepillo suave, una esponja o un paño de microfibra.
● Sacude las alfombras: retira la suciedad de las alfombras por ambos lados sacudiéndolas con fuerza. Limpialas con un cepillo y utiliza la misma solución limpiadora de interiores. No las coloques en el vehículo hasta que estén completamente secas.
● Ventila el interior: deja las puertas abiertas mientras limpias para que circule aire en el interior del vehículo y no quede húmedo.

Cuida tu vehículo - espacios interiores

¿Cuáles son los mejores consejos para cuidar los espacios interiores de mi vehículo?

Según la tapicería del vehículo, sus materiales y el tipo de manchas, puedes emplear algunas técnicas que te ayuden a conservar impecable el interior.

Para tapicería de tela


● Aspira bien los asientos, sobre todo en las juntas de las costuras donde se suele acumular sucio.
● Utiliza una esponja húmeda con agua y jabón u otro producto específico y frota los asientos con movimientos circulares sin ejercer mucha fuerza.
● Aplica espuma seca para manchas más difíciles y deja actuar el tiempo suficiente. Utiliza un cepillo suave si es necesario.

Para tapicería de cuero


● Antes de comenzar a limpiar aspira bien el polvo y la suciedad acumulados en los asientos.
● Utiliza un paño de microfibra humedecido con agua para limpiar las superficies.
● Seca con un paño limpio, también de microfibra.
● Aplica un limpiador de cuero y frotalo con un paño suave. Luego utiliza un acondicionador especial para este material.


Otros consejos


● Protege el interior del sol: parquea el vehículo en la sombra o colócale un parasol.
● Mantén las ventanillas cerradas para evitar que ingrese polvo.
● Lubrica las superficies del tablero y límpialas constantemente. Puedes hacerlo con productos como el Plasti-Glo o el Plasti-Mate, que son renovadores de plásticos de la marca Renault.
● Utiliza una brocha o cepillo pequeño para limpiar las rendijas de la ventilación.
● Usa paños de microfibra para limpiar y secar el tablero.
● Instala ambientadores de calidad para evitar malos olores.

¿Cuáles son los errores comunes al conducir que afectan los sistemas del vehículo?


Si no le das el uso correcto a tu vehículo, podrías producir fallas en sus sistemas. Estas son algunas malas prácticas:



● Dejar agotar el combustible: hace que la bomba de combustible trabaje de forma forzada, lo que produce su deterioro prematuro.
● Mantener presionado el pedal del embrague: Desgasta el sistema de embrague, pues las partes internas rozan continuamente entre sí.
● Abusar de los frenos en bajadas prolongadas: desgasta las pastillas, deforma los discos y agota el líquido de frenos.
● Mantener la mano sobre la palanca de cambios: produce una ligera presión sobre los mecanismos internos de la caja, lo que a la larga puede causar vibraciones y hacer que los cambios no entren de forma correcta.
● No revisar la presión de las llantas: si las llantas tienen una presión dispareja se produce un desgaste irregular en ellas y aumenta las posibilidades de que se revienten en marcha.
● No monitorear o desconocer las señales del tablero de instrumentos: si no ves o no entiendes las agujas o testigos luminosos no sabrás si hay una falla con los sistemas.
● Pasar a demasiada velocidad resaltos y baches: somete a las llantas a un esfuerzo innecesario, así como al conjunto muelle-amortiguador y al chasis.

Cuida tu vehículo - preparar viaje

¿Cómo debo preparar un viaje por carretera?

Para viajar por carretera y llegar a tu destino sin inconvenientes debes estar preparado y seguir algunos consejos para evitar problemas con tu vehículo.

● Lleva el vehículo a una revisión: es oportuno llevar tu vehículo a un taller autorizado para que lo revisen por completo, y así asegurar que esté en óptimas condiciones para emprender un viaje largo. Los frenos no deben estar desgastados ni presentar fallos, y la dirección y los amortiguadores deben encontrarse en perfecto estado.
● Chequea las llantas: antes de salir revisa que las llantas tengan la presión suficiente y que estén en buen estado. Es importante chequear que la llanta de repuesto esté en buenas condiciones; es decir, que tenga aire y que no esté pinchada. Además, debes asegurarte de contar con las herramientas necesarias para sustituirla en caso de accidentes.
● Comprueba la cantidad y el estado de los líquidos: verifica el nivel del aceite y si es necesario cambiarlo. El líquido de los frenos, el de refrigeración y el del limpiaparabrisas también deben revisarse. Es importante que los limpiaparabrisas estén en buenas condiciones para que en caso de que llueva tengas buena visibilidad.
● Revisa los elementos de seguridad y herramientas del vehículo: contar con extintor, triángulos y chalecos de seguridad, y verificar el estado de las luces te permitirá cumplir los requisitos legales y garantizar tu seguridad.
● Comprueba el funcionamiento de la batería: asegúrate de que funcione correctamente y no se descargue. Una señal de que está en mal estado podría ser que el motor arranque lentamente o que la batería pierda líquido.

¿Cómo conducir de forma segura en la ciudad?


Manejar un vehículo en la ciudad no es igual que hacerlo en carretera, donde la velocidad máxima permitida es mayor y no hay tantos obstáculos. En la ciudad, el tráfico y la congestión, así como los semáforos y los peatones, exigen un estilo de manejo diferente.

 

● Revisa la mejor ruta antes de salir. Gracias a los servicios de geolocalización puedes planificar con antelación las mejores rutas para llegar a tu destino.
● Observa lo que hay al frente, al menos a unos 300 metros7. Mira bien por dónde vas a pasar en los próximos 15 segundos, qué personas o animales hay, cuántos vehículos, si hay obstáculos en el camino, etc.
● Mantén la velocidad correcta (máximo 50 km/h en Bogotá y 60 km/h en otras ciudades) y el espacio suficiente entre tu vehículo y el de adelante:

○ Velocidad promedio en zonas residenciales y escolares: 30 km/h, con una distancia de 10 metros con el vehículo de adelante8.
○ Velocidad entre 30 y 60 km/h con una distancia de 20 metros del otro vehículo9.
○ Velocidad entre 60 y 80 km/h con una distancia de 25 metros10.

● Mira los tres espejos cada 10 segundos, aproximadamente, para tener un buen panorama de lo que pasa a tu alrededor.
● Asegúrate de que los peatones y los demás conductores te vean. Para ello utiliza las direccionales, las luces y el pito (cuando sea necesario).
● Evita correr sin necesidad. En la ciudad esta acción solo gasta gasolina; es mejor tratar de mantener una velocidad continua.
● Respeta las señales de tránsito. Debes atender correctamente a las señales en la vía para evitar accidentes.
● No consumas alcohol si vas a conducir y menos si estás manejando. Recuerda que estar bajo los efectos de esta sustancia al conducir, no solo es ilegal, sino que además pone en riesgo tu vida y la de otros.

 

Conclusiones:


Aprender a ser un buen propietario de vehículo es fundamental para mantenerlo en buen estado por mucho tiempo. Lo principal es conocer las partes que necesitan mantenimiento frecuente y cuándo y cómo debe hacerse. Tener este conocimiento te permitirá disfrutar mucho más tu vehículo y estar más seguro a bordo, ya sea cuando lo uses por la ciudad o cuando te vayas de viaje. Te invitamos a consultar el manual de bordo de tu vehículo y a la red de concesionarios que tenemos disponible para ti, allí te resolverán todas las dudas, además te darán consejos de utilización para que conduzcas con seguridad y mantengas tu vehículo en perfecto estado.